Quién escribe el punto final
a está anunciada partida
quizás tú con tu perfecta ortografía
o mi latente melancolía
Se despide con honores
a los pasados amores
con rosas o las mejores flores
Se viste de un negro profundo
por los corazones que fallecen
al instante de la despedida
en el adiós de la relación dónde ya no se respira la pasión
Está lucha llena de insultos y fracasos
las paredes testigos de los encuentros
murmuran el inevitable adiós
La despedida quién la escribe
y si la escribe; ¿Por qué la escribe?
¡Es el corazón que se ha abandonado a la desolación;
Entra la tristeza y deja aún lado su firmeza!
En el adiós se pintan cuadros, que se han pintado con sangre
de dos; Ya no existe el hasta mañana con signos de admiración
pronunciados.
En las canciones ni se escriben más de dos notas
todo por las arrinconadas y viejas guitarras rotas
y menos en el teclado, por que está desafinado
Las despedidas se bañan en matices grises
cómo las cenizas de un cigarro consumido
bajo la penumbre de la lluvia de octubre
Está despedida convertida en una espantosa poesía
no se escribe con punto y coma, sino con un punto
desigual que marca esté, nuestro final.
I. G.
Copyright © Irvin Guiovvani García González
a está anunciada partida
quizás tú con tu perfecta ortografía
o mi latente melancolía
Se despide con honores
a los pasados amores
con rosas o las mejores flores
Se viste de un negro profundo
por los corazones que fallecen
al instante de la despedida
en el adiós de la relación dónde ya no se respira la pasión
Está lucha llena de insultos y fracasos
las paredes testigos de los encuentros
murmuran el inevitable adiós
La despedida quién la escribe
y si la escribe; ¿Por qué la escribe?
¡Es el corazón que se ha abandonado a la desolación;
Entra la tristeza y deja aún lado su firmeza!
En el adiós se pintan cuadros, que se han pintado con sangre
de dos; Ya no existe el hasta mañana con signos de admiración
pronunciados.
En las canciones ni se escriben más de dos notas
todo por las arrinconadas y viejas guitarras rotas
y menos en el teclado, por que está desafinado
Las despedidas se bañan en matices grises
cómo las cenizas de un cigarro consumido
bajo la penumbre de la lluvia de octubre
Está despedida convertida en una espantosa poesía
no se escribe con punto y coma, sino con un punto
desigual que marca esté, nuestro final.
I. G.
Copyright © Irvin Guiovvani García González